Como cada año por estas fechas, tenemos que volver a regularizar nuestra situación con la Agencia Tributaria a través de la Declaración de la Renta. Al calcular el resultado, si te sale a pagar, debes saber que podías haber hecho las siguientes cinco cosas para optimizar tu Declaración de la Renta.
Si tu empresa dispone de un sistema de compensación flexible, debes saber que puedes pagar algunos servicios a través de este sistema para reducir la carga fiscal, tales como el seguro médico, la guardería, cursos de formación, la tarjeta de transporte o los vales de comida.
El ahorro fiscal deriva de la reducción de la base imponible del IRPF por lo que se paga menos impuesto.
Todo ello manteniendo la cotización a la Seguridad Social por la totalidad de las retribuciones, por lo que el sistema de compensación flexible, realmente sí compensa para ahorrar en la Declaración de la Renta.
Donar dinero a una ONG es una vía para hacer el bien, ayudando a causas humanitarias, además de servir para ahorrar en nuestra Declaración de la Renta. Por cada euro aportado a una ONG, fundaciones y otras entidades contempladas en la Ley 49/2002 se puede conseguir una importante desgravación:
Si invertimos en un fondo de pensiones o en un plan de previsión asegurado, hasta una cantidad límite de 8.000 euros o el 30% de nuestros rendimientos íntegros del trabajo o actividades económicas, podemos ahorrar algo más de 2.000 euros en la Declaración de la Renta, en función de los ingresos y de la Comunidad Autónoma en la que tributemos.
De esta manera, invertir en un plan de pensiones y en planes de previsión no sólo es una opción para el ahorro a largo plazo, sino que también lo es una a corto, ya que permite ahorrar en la Declaración de la Renta una importante cantidad de dinero, en función de las aportaciones, nuestro nivel de renta y situación.
Cuando se invierte en acciones, una de las opciones para obtener rentabilidad de la inversión es el cobro de dividendos. Si en nuestra cartera de acciones hay empresas que pagan dividendo, tenemos dos opciones para cobrarlo:
Si optamos por el cobro del dinero, a la hora de hacer la Declaración de la Renta, tendremos que considerar el importe recibido como parte de la base imponible; en cambio, si elegimos reinvertirlo en la compra de nuevas acciones de la compañía, no tendremos que tributar hasta que se ejecute la venta de las acciones, por lo que pagaremos menos a la hora de hacer la Declaración de la Renta.
Tras la última reforma fiscal, los contribuyentes podemos compensar los rendimientos del capital mobiliario con las ganancias y pérdidas patrimoniales. Esto significa que los rendimientos negativos del capital mobiliario se pueden compensar con el saldo positivo de las ganancias y pérdidas patrimoniales del ejercicio, con el límite del 25% de dicho saldo positivo. Y a la inversa, el saldo negativo resultante de la integración y compensación de las ganancias y pérdidas patrimoniales se podrá compensar con el saldo positivo de los rendimientos del capital mobiliario, con el mismo límite arriba descrito. En ambos casos, si tras dichas compensaciones quedase saldo negativo, su importe se podrá compensar en los cuatro años siguientes.
Si no has ejecutado ninguna de estas opciones de ahorro en la Declaración de la Renta de este ejercicio ya es tarde, pero puedes usarlas a partir de ahora y así conseguir el ahorro en el próximo ejercicio. Calcula tus números y no dejes pasar la ocasión de optimizar tu resultado del IRPF.