Los pequeños de la casa también ahorran

La educación financiera para los más pequeños de la casa es una de las asignaturas pendientes en muchos de los hogares españoles. Sin embargo, es habitual que los niños reciban ciertas cantidades de dinero a lo largo de su infancia como regalo o premio, por ejemplo, en su cumpleaños o por sacar buenas notas, aunque  no siempre saben muy bien qué deben hacer con él. Si esta situación te resulta familiar, quizá también te ayude saber qué es lo mejor que se puede hacer con el dinero de los pequeños de la casa.

Características generales de los productos de ahorro infantil

La mayoría de las entidades financieras suelen disponer de productos para el ahorro infantil. La mayoría de los que se pueden encontrar en el mercado suelen ser cuentas de ahorro que ofrecen una pequeña remuneración por el capital depositado, en torno al 0,25 - 1 %, y con gastos de mantenimiento muy bajos o nulos.

En estos productos, se fijan limitaciones para contratar y para su uso, de tal manera que al alcanzar la edad límite, el cliente debe decidir si opta por otro producto de la entidad dirigido al público en general, o bien se lleva su dinero a otra parte. Además, también se suelen fijar limitaciones operativas, sobre todo por seguridad, como sucede en las cuentas de ahorro infantil que no permiten la emisión de transferencias o las tarjetas de débito y crédito.

Hay cuentas de ahorro infantil que premian las aportaciones periódicas, ofreciendo incentivos en forma de tipo de interés, descuentos o puntos de programas de fidelización con el objetivo de fomentar el ingreso de dinero a lo largo del tiempo

La hucha como aliada de los productos de ahorro infantil

Viendo las características generales de las cuentas de ahorro infantil, es fácil ver que son una opción muy interesante para que los pequeños de la casa hagan sus pinitos con las finanzas personales y comiencen a ahorrar ya desde las edades más tempranas. La opción tradicional de la hucha está bien, pero si se quiere fomentar el ahorro de verdad, merece la pena abrir una cuenta infantil y animar a los peques a ahorrar.

La hucha es una opción, pero no debe ser la única. Por ejemplo, se puede animar a ahorrar 50 euros en la hucha, para llevarlos al banco cuando se junte esa cantidad. De esta manera, se evita la tentación de gastarlo en algún capricho sin mucho sentido y se educa a los más pequeños en las buenas prácticas financieras.

Otras opciones de interés: porque no todo es ahorrar

Además de las opciones de ahorro infantil, no está de más plantear opciones a los más pequeños de la casa para gastar su dinero. Viene bien para que puedan aprender el valor real de las cosas y sean conscientes del coste de la vida poco a poco, desde las edades más tempranas. ​

Por ejemplo, es posible plantearles participar en algún gasto del hogar de forma puntual, o también la compra de algún producto que desean, como una videoconsola o cualquier otro dispositivo que suele ser objeto de deseo de los pequeños.