¿Es posible abrir una cuenta en un país de la UE siendo español?
La búsqueda de un empleo en otro país, una beca para estudiar en una Universidad extranjera o la intención de emigrar para aprender otro idioma, quizá hayan llevado a hacerte una misma pregunta: ¿puedo abrir una cuenta en un país de la Unión Europea que no sea el mío? Pues la respuesta es sí. Todos los residentes en la Unión Europea tienen derecho a abrir una cuenta bancaria básica con independencia de cuál sea su nacionalidad, su lugar de residencia o su situación financiera.
El Parlamento Europeo aprobó el pasado año una directiva destinada a hacer más transparentes, económicas y accesibles las cuentas bancarias en toda la Unión Europea. Esta nueva norma implica, precisamente, facilitar que los ciudadanos europeos puedan abrir lo que llaman una cuenta bancaria básica en cualquier país miembro de la Unión. Esta cuenta permite pagar, retirar dinero o realizar transferencias dentro de la Unión Europea. Esta posibilidad beneficiará sobre todo a aquellos estudiantes que, por ejemplo, disfruten de una beca Erasmus, que no son residentes fijos en el país en el que van a cursar estudios. Eso sí, el banco podrá pedirte que justifiques de alguna forma tu interés en abrir esa cuenta.
En cualquier caso, a la hora de abrir una cuenta en un país de la Unión Europea debes tener en cuenta que te pedirán lo mismo que aquí en España. Es decir, deberás acreditar tu identidad, presentar el D.N.I. donde aparecen datos como nombre y apellidos, el lugar y la fecha de nacimiento y el domicilio (que podrías tener que acreditar con un recibo de la luz, agua…); el banco también te preguntará por datos tales como tu profesión y tu estado civil. En un banco extranjero, además, es posible que te pidan una nota acreditativa realizada por un banco español con todos tus datos. También, como podría hacer un banco español, la entidad realizará un análisis del riesgo que podemos suponer para ellos, si estamos o no en un registro de morosos y pregunten el motivo de nuestro interés.
Lo lógico también si queremos abrir una cuenta en el extranjero es que contemos con una en España desde la cual se enviará el dinero a la entidad del país por la que nos hayamos decidido. Hay que saber, también, que tendremos que informar al Banco de España en el plazo de un mes de la apertura de la cuenta y, también, habrá que cumplir con Hacienda por los rendimientos que nos genere. Hoy en día el proceso de abrir una cuenta puede ser relativamente sencillo porque se puede realizar a través de Internet aunque algunos bancos pueden requerir nuestra presencia física.
En definitiva, a pesar de la extendida creencia de que abrir una cuenta bancaria en el extranjero no es posible, la Unión Europea permite que cualquier ciudadano que pertenezca a un país miembro pueda acceder a esta posibilidad casi con las mismas condiciones y derechos que si la abriese dentro de su propio territorio nacional.