Consejos de la CNMV para ahorrar y equilibrar ingresos y gastos

​​​​Nuestras abuelas siempre han sido nuestras mejores asesoras económicas. Todos hemos recibido multitud de consejos sobre la importancia del ahorro. Frases como "si ganas cuatro, no gastes cinco" o "ahorra, que no sabes lo que podrá venir el día de mañana" han sido un tema recurrente de conversación en el seno de la mayor parte de familias españolas. Y si a ellas les ha ido bien, por qué no iba a venirnos bien también a nosotros.

​Quizá como consecuencia de la necesidad de enseñar las virtudes del ahorro entre la población, la CNMV ha publicado una lista de consejos para equilibrar nuestros ingresos y gastos para, de esta manera, poder ahorrar. Un listado que, lejos de tecnicismos ni acciones difíciles de comprender, se ha convertido en una guía fácil que cualquiera de nuestras abuelas hubiese firmado.

Elaborar un presupuesto familiar

La CNMV recomienda elaborar un presupuesto familiar para equilibrar ingresos y gastos. En él, se creará una columna en la que se detallen los ingresos, especificando de dónde vienen estas entradas, junto con una segunda columna, la de los gastos, que será mucho más detallada. El organismo recomienda clasificar los gastos en función de las siguientes categorías:

  • Obligatorios: categoría fija, ya que no es posible dejar de pagarlos ni variar su importe.
  • Necesarios:​ son aquellos que se podrían reducir, pero no eliminar. Entre ellos, destacan las facturas de Internet, de electricidad o del teléfono.
  • Ocasionales: son aquellos gastos prescindibles que podrían eliminarse si fuese necesario, como los gastos relacionados con el ocio (cine, cenar fuera, comprar ropa que no se necesita...).​

El ahorro, un "gasto fijo"

​Una vez elaborado el presupuesto, la CNMV recomienda incluir la parte destinada al ahorro dentro de los gastos fijos​​ y, a poder ser, ​marcándose un objetivo fijo mensual como, por ejemplo, destinar el 10% de nuestro sueldo a este fin y, a ser posible, a principios de cada mes. De esta manera, podremos conseguir nuestros objetivos de una forma más sencilla o afrontar imprevistos con mayor desahogo.

​¿Tirar de créditos? Solo de forma puntual

​En algunas ocasiones en las que nuestras finanzas personales no están todo lo boyantes que nos gustaría, surge la necesidad de obtener una fuente de ingresos extra. En este contexto, los créditos y préstamos son una auténtica tentación, y más en la situación actual, en la que acceder a financiación es muy fácil gracias a la multitud de alternativas existentes en el mercado.

En estos casos, conviene identificar la necesidad para valorar qué tipo de financiación necesitamos. Si se trata de una necesidad puntual y aislada, es posible que no sea necesario acudir a la banca tradicional, y podamos afrontarlo a través de un microcrédito, que es la manera más rápida y sencilla de obtener liquidez a corto plazo. Sin embargo, si nos encontramos ante una necesidad más onerosa (como, por ejemplo, cambiar el coche porque el nuestro ya no funciona), la financiación bancaria puede ser la mejor alternativa.​

En definitiva, la CNMV trata de concienciar a las familias españolas de la importancia del ahorro con consejos que utiliza el sentido común que nuestras abuelas intentaban inculcarnos. Y ya se sabe, más sabe el diablo por viejo que por diablo.​