El dinero de plástico viene con seguro incorporado

Pagar con "dinero de plástico", es decir, con tarjetas de crédito y débito, puede tener una serie de ventajas que mucha gente no se ha planteado. Concretamente, una de estas ventajas son los seguros que algunas tarjetas llevan incorporados y que responden de algunos riesgos de productos y servicios pagados con ellas.

Accidente, robo, cancelación, son ejemplos de las coberturas que se aplican en el caso de pagar servicios de viajes con algunas tarjetas de crédito del mercado. Estas coberturas se incorporan automáticamente en el momento del pago, de tal manera que se incluye, sin coste y sólo por el hecho de abonar el importe mediante la tarjeta. Nunca está de más disponer de un seguro que cubra algunos riesgos que pueden transformar un viaje en una odisea y hacer que el coste del mismo se dispare con respecto al presupuesto estimado.

Por ejemplo, hay entidades emisoras de tarjetas de crédito que sólo por el hecho de pagar con tu tarjeta, incluyen en los contratos de sus "plásticos" seguros para cubrir gastos médicos por accidente o enfermedad, por traslado especial de vuelta al domicilio y repatriación, por pérdida de equipajes o demora en la entrega en destino, entre otros.

Una cobertura de interés, a la vez que poco conocida, es la que cubre los gastos por accidente o daños en coches de alquiler, de tal manera que actúa como una especie de extensión del seguro obligatorio del vehículo y permite ahorrarse pagos adicionales en concepto de seguros y franquicias a la hora de contratar el servicio a las compañías de rent a car. Este seguro es poco frecuente, pero hay tarjetas que lo incorporan, normalmente dirigidas a segmentos con bastante poder adquisitivo.

Otro ejemplo de seguro que llevan incorporado tarjetas de crédito es el que añade la cobertura por robo y accidente a productos pagados con tarjeta de crédito o débito. De esta manera, se puede conseguir una compensación si se produce alguno de los supuestos considerados (rotura de una pantalla de un tablet, robo de un reloj, etc.)

Más seguros que se suelen incorporar en las tarjetas bancarias son los asociados a la seguridad y al uso fraudulento de las mismas. Estos seguros son muy importantes porque cubren la responsabilidad en situaciones en los que incluso la integridad física de las personas puede estar en juego y, por tanto, ayudan a comprender que más vale entregar la tarjeta, incluso con el pin, a alguien con malas intenciones, que jugarse la vida por unos euros.

Hay muchos más seguros que se pueden encontrar en los contratos de las tarjetas de crédito, basta con revisar las cláusulas y condiciones firmadas con la entidad emisora de cada una. En estas cláusulas también se incorporan las condiciones para reclamar las compensaciones en caso de siniestro, que también es importante tener controladas y a mano, para poder acceder a la vía de reclamación o petición de ayuda si fuera necesario (por ejemplo, en un viaje en el extranjero).

​Por todo lo anterior, conocer si una tarjeta de crédito o débito lleva incorporados seguros, es importante y, tanto a la hora de contratar un producto nuevo, como a la hora de pagar, puede ser un factor diferencial. Si vamos a firmar un nuevo contrato o a pagar con tarjeta una compra, a igualdad de condiciones financieras, puede que los seguros sean los que marquen la diferencia, decantándote por la opción que tenga mejores coberturas.