Autónomos innovan y triunfan. Ejemplos de éxito

​Cada vez tenemos más clara la importancia de la innovación, pero no tanto quiénes son sus protagonistas. Por supuesto, las grandes empresas tienen un papel muy importante, pero también las pymes y los autónomos. Veamos algunos ejemplos.

Las nuevas formas de atender al cliente

Se puede probar a prestar el mismo servicio o vender los mismos bienes, pero de una forma diferente a la que se ha venido haciendo hasta el momento. Pensemos, por ejemplo, en la prestación de servicios en movilidad en actividades tradicionalmente fijadas en un local de negocio como ha sido el caso de los food trucks que ofrecen comidas gourmet. o en quienes han creado una app para prestar una versión móvil de un servicio.

La búsqueda de nuevos mercados

Los autónomos pueden introducirse en mercados en los que su entrada supone una gran novedad. Un ejemplo es la prestación digital de servicios a lugares lejanos. Incluso, algunos autónomos trabajan a nivel global. No hablamos solamente de ciertos despachos profesionales exitosos, sino que también se van incorporando otros negocios, como pequeñas tiendas online que venden productos muy especializados en el mundo entero.

La participación en proyectos de investigación y desarrollo

Los autónomos también pueden dedicar una parte de su tiempo a la investigación y al desarrollo y no necesariamente solos. Por ejemplo, un médico que trabaje por cuenta propia puede colaborar en una investigación sobre las enfermedades de su especialidad. Además de aportar su “granito de arena” en la lucha por mejorar la salud de la población, puede adquirir conocimientos punteros que son profesionalmente enriquecedores.

La introducción de nuevos productos

Estamos ante un tiempo en el que se ofrecen cada vez más productos, en parte ligado al desarrollo de nuevas profesiones que pueden ser desarrolladas de forma autónoma. Por ejemplo, hay desarrolladores de apps, analistas de big data o community managers que ya trabajan como autónomos.

Los cambios en los procesos

La transformación digital está proporcionando múltiples herramientas para que los autónomos prueben cambios en sus procesos de producción. Es más sencillo, por ejemplo, intentar trabajar sin papel, en movilidad, de forma remota, en colaboración con otros profesionales con los que no se comparte espacio físico, etc.