Siete libros para mejorar tu productividad en el trabajo

Ser productivo en tu trabajo

​La productividad sigue siendo una de las mayores preocupaciones de las empresas actuales. Conseguir que los recursos sean lo más eficientes posible es un objetivo en el que las compañías centran sus esfuerzos, algo que va en línea con los objetivos económicos que también persigue el Gobierno y las Administraciones Públicas con el objetivo de conseguir un aumento de la tan ansiada competitividad.

Organízate con eficacia, de David Allen

El título del libro ya es suficientemente descriptivo de lo que después nos vamos a encontrar en sus páginas. Su objetivo es demostrar que existe un sistema de organización del trabajo que permite liberar nuestra mente de aquellas tensiones que impiden el fomento de nuestra creatividad para hacernos más eficaces en todos los ámbitos, y no solo en el laboral.

Horas extra para tu vida, no para tu trabajo, de Miguel Sánchez y Javier Eguíluz

Se trata de un libro que se sale de lo normal en todo lo que se refiere a la productividad. La idea que ofrece es que por mucho que trabajemos, las horas extra en exceso solo provocarán un mayor nivel de estrés que harán que nuestro proyecto acabe, de nuevo, fuera de plazo. Por eso, este libro nos propone una metodología de trabajo para menos pero mejor, y no más y peor.

Dueño de tu tiempo, de Ian Cooper

En ocasiones, los libros que fomentan buenos hábitos laborales son complicados de leer, tienen demasiados conceptos que, en realidad, no son necesarios y llevarlo a la práctica no siempre resulta tan placentero como parecía. En "Dueño de tu tiempo", Ian Cooper nos propone un método sencillo, alegre, fácil de leer y, sobre todo, práctico para vivir mejor y evitar pérdidas de tiempo innecesarias.

Hazlo ahora: supera tu procanistación y saca provecho de tu tiempo, de Neil Fiore

Este libro es un manual de referencia para superar la procanistación, es decir, ese mal hábito de ir dejando de lado el trabajo que tenemos pendiente para un momento posterior. Publicado hace más de 20 años en Estados Unidos, este manual nos proporciona una serie de pautas y consejos útiles y prácticos para mejorar nuestra productividad y sacar el máximo provecho por nuestro tiempo, evitando el estrés que muchas veces produce la acumulación de tareas, las fechas tope de entrega y el trabajo atrasado.

Gestiona mejor tu vida, de Alberto Pena

En muchas ocasiones, pensamos que Internet y las nuevas tecnologías pueden ser nuestro mejor aliado para mejorar la productividad. Sin embargo, a veces dejan de ser útiles y pasan a ser un obstáculo infranqueable. Alberto Pena, a través de su libro, pone ejemplos prácticos y da multitud de consejos basados en su experiencia personal y profesional, invitando al lector a dar pequeños pasos para alcanzar grandes metas. El gran secreto es aplicar una nueva mentalidad a nuestra conducta, cambiar de hábitos y reactivar la motivación dormida.

Productividad personal: Aprende a liberarte del estrés con GTD, de José Miguel Bolivar

La naturaleza del trabajo ha cambiado profundamente en la era de la información. Nuestras tareas ya no son tan mecánicas y evidentes y muchas veces no sabemos si están finalizadas y cuando. Todo es nuevo y, por esta razón, José Miguel Bolivar trata de arrojar algo de luz sobre cómo reducir el estrés que surge como consecuencia de esta nueva forma de trabajar a través de la metodología GTD, ideada por David Allen. GTD se basa en herramientas para mantener el control de nuestras tareas y la perspectiva necesaria para tener claras las consecuencias a corto, medio y largo plazo de las decisiones que tomamos.

Productividad personal en una semana, de Jerónimo Sánchez

Si bien la mejora de nuestra productividad puede llevarnos bastante tiempo, los primeros pasos pueden estar dados en unos pocos días. Con este libro de Jerónimo Sánchez aprenderemos a organizarnos de manera más eficiente. El mero hecho de recopilar y procesar los asuntos pendientes, planificar los proyectos de forma natural o hacer una revisión semanal de nuestras tareas son hábitos que podemos ir desarrollando, aunque no están exentos de esfuerzo.​